El viaje de Johnny

Johnny be good cogió la escalera al cielo,
era humo en el agua, una autopista al infierno.

Johnny be good mandó un mensaje en la botella,
aquel domingo sangriento: "Este es el final"

Johnny be good calculó el número de la bestia,
intentaba no ser otro ladrillo en el muro.

Johnny be good viajó a la cara oculta de la luna,
con las arañas de marte, donde se fueron las flores.

Imagina o pájaro negro en brazos de Penny Lane,
nosotros somos los campeones, los sultanes del swing.

Jonny be good se casó en el Hotel california,
ella se llamaba Sheena, Sheena es una punk rocker.

Jonny be good vivió en la casa del sol naciente,
El cordero nació en Broadway, es lo que le dijeron.

Bienvenido Aqualung, maestro de muñecos, 
soy El hombre esquizoide en la corte del Rey Carmesí.

Estoy satisfecho, Dios salve a la reina.

Chico no llores más.

La caja de música

Aunque a veces
desaparece el mundo,
el espejo se rompe
y ando entre calles oscuras.
Donde ahora
no hace falta la luz, las polillas
se queman en el fuego eterno
que las atrae.

Abro la caja de música,
conozco su mecanismo,
seducido por la melodía
que me hace bailar.

Muevo mis brazos y piernas,
muestro mi pecho desnudo,
desencajadas mi boca y mis ojos
por la velocidad.

Aunque siga estando dormido,
gira la tierra,
y cada átomo de mi cuerpo
alrededor del vacío.

Cada giro, cada segundo
pierdo el sentido,
hasta que la cuerda acaba
o el sortilegio
llega a su final.

Gestos cómplices

El gesto callado de mis ojos
que rehuye el lazo
que tu mirada tiende.

Atrapando la flor sin raíz
que de mi boca crece
y en tu oído muere.

No entiendo el canto de los grillos
en la noche.
Ni el cortejo de las nubes
con el viento,
con el viento.

Cada gesto tuyo
cómplice del mío.

Blanco sobre negro

Se encienden las luces,
siguen allí
luminarias rotas.

Sobre la pantalla
proyectan mis ojos
la voz de los ecos.

Se extingue la vida,
parpadeo de luces extrañas.

Siempre hay un quizás
que aguijonea al necio.

¿Como no va ser
el firmamento infinito
si no tiene fin
el amor que persigo?

Estéril suspiro en la tormenta,
la tormenta,
la tormenta,
estéril suspiro en la tormenta.

Dejándose llevar
mi amor avanza

Suéltalo

Todo sigue en su lugar
hasta que apareces tú,
como un martillo pilón
que nadie habrá de parar.

Y de nuevo en soledad
recompongo mi ansiedad,
hay un hueco para ti
que nunca habré de llenar.

Y siento lo que pasó
no me arrepiento de ser como soy,
no pienso echarme atrás,
de nada me tengo que avergonzar.

Esto es lo que siento.

Suéltalo.

Dime lo que sientes y ya está,
dime lo que sientes, es lo mejor.

Suéltalo.

Vaga luz de soledad (versión 2014)

Pequeña sombra de soledad
se entreve en tus ojos,
fluyendo de ellos,
un riachuelo orgulloso.

Se estremece en la mano
al contacto con la lluvia,
escondiendo su rostro pálido
al latido de la luna.

Llama que la brisa apaga
tu luz de cálido aliento,
entre hogueras y negras brasas
tu fuego que nunca quema descansa.

Vaga luz de soledad,
vaga luz de soledad.

El profesonal

No se si te engaño
al decirte amor,
si hablan mis entrañas
o un profesional.

Aprendí a hacerlo,
soy muy bueno
cayendo bien;
guardo mis deseos,
no soy fuerte
si hay que luchar
contra los demás.

Y ya estoy cansado
de hacerte reír,
de no decir nada
que te pueda herir.

No me des la espalda,
sigo siendo
el de ayer;
lo que ha cambiado
es la trama
del gión;
de extra a director.

Crisis

Nunca me han fallado las personas
que de veras cuentan para mí;
se me cae la baba con mi niña,
no se lo que haría sin mi amor.

Tengo un buen trabajo, bien pagado
de lo que siempre quise hacer.
¡Qué placer poder llegar a casa,
y disfrutar de la paz del hogar.

Gira, gira, gira y gira sin parar;
y es que la vida es tan bella, de verdad;
gira, gira, gira y gira el mundo
irradiando calma,
lleno que alegría y felicidad.

Un camión se traga a mi niña
que corría detrás de su balón;
mi mujer no pudo soportarlo,
se quitó la vida; a mí también

Me han echado del trabajo,
no rendía nada, es la verdad;
mi casa se la ha quedado el banco,
no tenía ya con que pagar.

Gira, gira, gira y gira sin parar,
y es que la vida es un asco, de verdad;
gira, gira, gira y gira el mundo
estallando en trozos,
lleno de tristeza y de dolor.

No me queda nada entre las manos,
no me queda nada bajo los pies,
no me queda nada en la cabeza,
no me queda nada en el corazón.

Gira, gira, gira y gira sin parar,
y es que la vida está loca, de verdad;
gira, gira, gira y gira el mundo
sin ningún sentido,
lleno de misterio y fascinación.

Gira, gira, gira y gira sin parar.

Melancolía

Es mi fe melancolía
convertida en pedernal,
contrapeso de la vida
que se va
y nunca volverá.

Arrojado a un mar de sangre,
a corrientes de metal,
se diluyen los momentos
de pasión
de pura libertad,
de placer,
de amor y de amistad.

Y me vuelvo a despertar
solo y asustado,
lejos de mi hogar.
Cuelgan de mi corazón
trozos del pasado,
flecos del ayer.
De un ayer
que siempre fue mejor.

Son palabras son momentos
llenos de profundidad,
es la espuma con el viento
que se va
y nunca volverá.

Tantas horas que he pasado
recordándote sin más,
es que el viento está parado,
cuando el sol
hace ampollas en mi piel,
que es tu piel
la que quiero acariciar.

Y me vuelvo a despertar
solo y asustado,
lejos de mi hogar.
Cuelgan de mi corazón
trozos del pasado,
flecos del ayer.
De un ayer
que siempre fue mejor.

Canción de amor (Rous)

Discursos hago cuando te amo,
poco corazón, que muere al momento,
y avanza celoso en el mar de sangre,
cada vez que renace se vuelve loco.

Pisan mis pies caminos secos,
se hunden en lodo cuando te amo.
Si es que pudiera sepultar la duda,
recogería tu cuerpo que deprendió la luna.

Sólo hay verdad cuando tus ojos hablan;
ruego que me hablen sin decir nada;
porque no hay nada como callar tus ojos
diciendo te quiero cada mañana.

Belleza

Soy el viento cuando sopla,
el placer de la sonrisa,
llamaradas en la hoguera,
el dolor de las heridas.

Soy el sueño cuando choca
con la cruda realidad,
el silencio que antecede
a cada amanecer.

El camino por andar,
el camino que se anduvo,
la tormenta que antecede a la calma,
la paloma de la paz.

Esto es lo que queda,
esto es lo que hay.

Las luciérnagas de noche,
los tesoros bajo tierra,
el sudor de las axilas,
las estrías en la piel.

El hastío cuando espero
prisionero del azar,
la esperanza que se pierde
cuando ya no hay nada más.

El olvido al caminar
sin poder mirar atrás,
la cordura en los locos de atar,
la locura del bazar.

Esto es lo que queda,
esto es lo que hay.

El final de la escapada,
el mensaje en la botella,
el ladrido de los perros,
la corriente que nos lleva.

El filo del precipicio
al final de la pasión,
El principio de una vida,
el amor que la engendró.

El clamor de la verdad
que nada puede parar,
la pregunta que se queda en el aire
la respuesta que cambió.

Esto es lo que queda,
esto es lo que hay.

El final de una canción.

Conexión (Rous)

Aquellos que conectan los cables,
los del corazón emplumado,
deslizan los días sórdidos
en el calendario sin santos.

Las luces del árbol de navidad
cegando mis ojos como soles,
estrangulando la sabia
con la ley del deseo.

Nieva la blanca luz
del fluorescente,
sobre mis pies anclados
como mecha del mundo.

Y nosotros hijos pródigos
caminando en tranvías,
descarrilando gustosos
en montañas rusas de plácido mar.

Otro ladrillo en la pared (Pink Floyd) (versión Rous)

Cuando iba al colegio me encontraba con maestros
que humillaban a los chicos de la forma que mejor podían hacer.

Descargando su escarnio ante cualquier cosa que hicieran,
exhibiendo sus vergüenzas, las que nunca se deberían de ver.

Pero era bien sabido que sus gordas esposas
les pegaban y humillaban hasta quitarles la vida.

No queremos educación,
no queremos más control,
no queremos más sarcasmo,
déjanos de una vez en paz

Maestro, déjanos en paz,
sólo somos un ladrillo en el muro,
sólo somos un ladrillo más.

El castaño (Rous)

Planté un castaño
a la luz de la luna,
entre la bruma
lo vemos crecer.

Quiso ser luna
antes que árbol,
y entre sus ramas
poderla abrazar y bailar,
poderla abrazar y bailar.

Y bailaron todo el día,
mientras sus ramas ardían;
y la bruma los cubrió
intentando congelar
su corazón de vidrio;
la luna se lo llevó,
entre estrellas lo plantó;
la luna se lo llevó,
entre estrellas lo plantó.

Brillan sus hojas
entre la bruma,
crecen sus frutos
entre la tierra y el mar,
entre la tierra y el mar.

Una sombra a la luz de la luna (Mike Olfield) (Versión Rous)

Ella vio como fue arrebatado
por una sombra a la luz de la luna,
presintiéndolo murió arrebatado
por una sombra a la luz de la luna.

Fue un misterio aquel sábado noche
lejos de allí, al otro lado;
atrapado en medio de la batalla,
ella no pudo llegar hasta él.

Ella vio como fue arrebatado
por una sombra a la luz de la luna,
presintiéndolo murió arrebatado
por una sombra a la luz de la luna.

Vio la silueta de una pistola

lejos de allí, al otro lado,

que fue disparada por un hombre que huyó,

ella no pudo llegar hasta él.

Me quedo,

rezaré,

nos veremos pronto en el cielo,

me quedó,

rezaré,

nos veremos pronto en el cielo.

Ella vio como fue arrebatado
por una sombra a la luz de la luna,
presintiéndolo murió arrebatado
por una sombra a la luz de la luna.

Las estrellas de desplazarán

lejos de allí al otro lado,

vendrá ha hablarte éste anochecer,

pero no pudo llegar hasta él.

Me quedo,

rezaré,

nos veremos pronto en el cielo,

me quedó,

rezaré,

nos veremos pronto en el cielo.

Como el cielo (The Cure) (versión Rous)

Dime como haces ese truco,
el que me hace gritar,
el que me hace reír;
Ella me abrazó.

Dime como lo haces
y te prometo que
escaparemos juntos,
escaparemos.

Girando en la orilla
besé tu cara y tu cabeza,
soñé todas las formas
de hacerte brillar.

¿Por qué estás tan sólo?;
me dijo: Nunca lo sabrás;
que estoy enamorado,
enamorado de ti.

Tú, suave y única,
tú, perdida y sola,
tú, extraño ángel,
en el mar profundo,
girando en el agua,
igual que un sueño,
igual que un sueño.

La luz del día me despertó,
he pasado tanto tiempo,
moviendo mis labios
respiro tu nombre.

Y me quedé sólo,
solo, solo en un mar,
en un mar de rabia
donde se ahogó mi amor.

Tú, suave y única,
tú, perdida y sola,
tú, como el cielo.

Contigo o sin ti (U2) (versión Rous)

Veo la piedra en tus ojos,
veo la espina en tu costado,
espero por ti.

Juego de manos del destino,
cama de clavos donde espero,
espero sin ti.

Con o sin ti, con o sin ti.

A través de la tormenta
alcanzaremos la orilla,
te estoy esperando.

Con o sin ti, contigo o sin ti,
no puedo vivir con o sin ti.

Mis manos atadas,
mi cuerpo herido ella me dijo:
Nada que perder, nada que ganar.

Y tú te entregas, y tú te entregas,
tú te das, tú te das,
y tú te entregas.

oh, oh.oh,.....................

Con o sin ti, contigo o sin ti,
no puedo vivir con o sin ti, con o sin ti.

Que sería

Si cada gota
de agua de mar,
si cada rayo
de sol al llegar,
que sería,
que sería,
de mí.

Si cada espiga
de oro y de pan,
si cada piedra
que hecha a rodar,
que sería,
que sería,
de mí.

Que sería del ayer
si camino,
que sería del dolor
si respiro.

Si estoy vivo.

Si cada día
que empieza se va
con cada noche
al despertar,
que sería,
que sería,
sin mí.

si cada sombra
se puede pintar,
si cada escusa
se puede acabar,
que sería,
 que sería,
de mí.

que sería del ayer
si camino,
que sería del dolor
si respiro.

Si estoy vivo.

EL ancla (Rous)

Mira esa ola,
orgullosa alzó su cresta blanca,
furiosa rompió contra las rocas,
exhaustos sus huesos,
arrojados de nuevo al anonimato del mar.

Mira mis pies,
hundidos en tierra, como lastre tus besos.
No puede el ancla flotar en el agua;
pero mira ese barco,
desafía al viento amarrado a ella.

Flotará el ancla
si ha de salvarte,
se hundirá en la tierra
si el viento te lleva.

No quiero ser libre si te voy a perder.

Los autobuses siguen pasando (Rous)

Los autobuses siguen
llegando a la estación,
rostros pálidos pegados
a las ventanillas.

Son los mismos rostros
cada vez más viejos,
pero con la misma expresión.

Voy por las mismas calles
a la misma hora,
calles derruidas,
mi rastro en el asfalto.

¿Será cierto que me sigues
queriendo cuando ya
hace tiempo que te has ido
y no se donde estás?

Mañana despertaré
a la misma hora,
en el mismo lugar.

El sol ya no brilla
la luna no está,
el teléfono suena
nadie llama.

Desierto (Rous)

El desierto
se extiende inpoluto, tantos
granos como sonri-
sas caídas,
como estrellas en el cielo
reflejando
reflejando el infinito.

Oasis de sal,
pozo profundo de
agua helada,
salpica mi rostro
y mi boca
mi sonrisa que quizás
despierte nunca,
que nunca despierte,
que nunca despierte.

Ese transcurrir
cansino,
que de pronto se
desboca
en cascadas de
placer o pena,
en cascadas de
placer o pena,
en cascadas de
placer o pena,
en cascadas de placer.

Mar de dudas

Todos los días cambia
el oleaje de las hojas;
cuando el viento sopla
naufragan miradas en el mar.

Las sirenas
de los buques
en la niebla.
El griterío
de gaviotas
en alta mar.

Encuentro en mi memoria
horas prendidas en el cielo;
retratos envejecidos
arrastrados por el mar.

Pintura fresca que cambia
cada amanecer;
chorreando en mis ojos,
olas que solas se van,
olas que solas se van.

Las sirenas
de los buques
en la niebla.
El griterío
de gaviotas
en alta mar.

Todos los días cambia
el oleaje de las hojas;
cuando el viento sopla
naufragan miradas en el mar.

Sudor (Rous)

Cogí mis maletas llenas de sueños,
me sonrió unos ojos, y engatusado perdí el tren.

Abrí la maleta, salió la niebla,
la tierra se inunda de risas, sueños y absolución.

Ensimismado en tu cuerpo
lo aprieto al mío
hasta que deja de temblar.
Ajustando contornos,
llenando cada hueco,
la niebla se convierte en sudor.

Hago unos agujeros en las paredes,
sale la niebla, señales de humo anunciándome.

Tambores resuenan alrededor de mi,
tambores mis pasos y mis latidos sobre la tierra.

Ensimismado en tu cuerpo
lo aprieto al mío
hasta que deja de temblar.
Ajustando contornos,
llenando cada hueco,
la niebla se convierte en sudor.

El grito de los olvidados (Rous)

Escucho el grito
de los olvidados cuando olvido quien soy.

Si están los frutos
antes que el árbol, relamiendo mis labios.

La larga sombra
sobre el desierto que proyecta el sol

ignora las dunas,
como cuerpos tendidos al sol.

Lejos tus ojos,
perlas de azul misterio.

Oculta libertad (Rous)

Fuego y sangre en la vida,
entre la lucha y la libertad;
juego astuto es la sensación
de poderla encontrar.

Se que estoy asustado,
se que no puedo más,
se que estoy acabado,
se que quiero llegar.

No te puedo ni mirar,
puedo encontrar
en tu rostro el temor
a la soledad.
Hay caminos sin pisar,
puedo encontrar
en la luz la oscuridad.

Puertas de entrada y salida (Rous)

Hacia las carreteras
que inundan desiertos,
se extienden mis manos
a través de ti.

Las corrientes del tiempo
creando el mundo,
creando el cielo
a través de ti.

Puertas de entrada,
puertas de salida;
sepulcros abiertos
de par en par;
donde nada queda
después de ti,
donde nada había
antes de ti.

Me quedo dentro de ti,
desaparecen los pájaros;
entono una canción,
la canción sin eco.

El duelo por lo que vendrá
sucedió hace tiempo,
sólo el cuerpo
queda con vida.

Puertas de entrada,
puertas de salida;
sepulcros abiertos
de par en par;
donde nada queda
después de ti,
donde nada había
antes de ti.

Abismo

Las bestias pacen
en el mar subterráneo;
dales de comer
tus piernas, tus brazos.

Sus cuerpos blandos
se sumergen en la arena;
más y más abajo,
abismos insondables.

El abismo soy yo,
mis piernas, mis brazos,
la piel que me envuelve
se extiende por dentro,
se extiende por fuera;
la bestia soy yo.

La delgada linea que separa
el viento;
miro a cada lado y quizás
me duermo;
y quizás despierto, y sigo aquí
soñando;
envuelto en brumas de siglos
pasados.

Sol de cristal (Rous)

Sol de cristal,
mirada llena,
que luz lechosa
empañando espejos.

Crujido de alma
embarrada en carne
donde inyecta
el veneno la araña.

Carne de gallina
por abrigo piel de lobo.

Luz de focos,
luminaria,
baile de sombras en mi vientre.

Bajando, bajando,
olas respirando,
sueños reales,
mareas vivas

carne de gallina
por abrigo piel de lobo.

Sol de cristal.

Ropas (Rous)

Habló mi camisa al cuello
suspirando amores;
consiguió un sombrero a juego,
pantalones a rallas.

Zapatos y guantes
para andar y tocarte;
abrigos de pieles
para envolverte y verte.

sonríe mi chaleco de ante
a tu vestido rojo;
mi chaqueta de pana
levanta tu falda.

Y el cuero de la máscara
que envuelve mi rostro
obedece al látigo
de tu lengua.

Ponte el camisón
que mis sueños roba,
la ropa interior que viste mi alma.

En la playa hay mas piel para quemar,
más agua para ahogar los sentidos;
y quedarse sólo con lo que la marea
deja en la orilla: Arena, tierra y arcilla.

Quítate el camisón,
la ropa interior.